En cuanto vi esta novela entre las novedades de Harlequin supe que tenía que leerla y mi instinto no ha fallado. He de decir que el sello HarperCollins de narrativa me está gustando un montón, están apostando por nuevas voces con historias originales. Con este libro me ha pasado algo curioso: en sí la historia puede parecer sencilla, una vez que lo terminas acaba cuadrando y desde una perspectiva externa o ajena puede parecer que peca de simple, pero todo lo contrario. Con pocos personajes y dos historias paralelas que van conectándose prácticamente desde el inicio, la autora logra tejer una novela trepidante que me ha atrapado de principio a fin. Voy a desgranar un poco la novela, sin llegar a spoilear. Tenemos dos historias: la situada en el pasado, concretamente en Londres del siglo XVIII y la que transcurre en la actualidad. En cuanto a la primera, conoceremos a Nella, una boticaria que ejerce su oficio siguiendo el legado de su madre, aunque con un añadido porque ella sí utiliza el veneno como solución a los problemas de muchas mujeres. Uno a uno, anota el nombre de todos los hombres que han caído con sus pócimas, a petición de alguna mujer. En uno de los encargos, conocerá a una muchacha, Eliza, que le acabará robando el corazón (en sentido fraternal, no romántico). Por otro, tenemos a Caroline, una historiadora que lo dejó todo por amor. Vivía en su burbuja de dicha marital, sacrificando sus sueños para poder estar con su marido. Él economista y ella acaba en un negocio familiar. Casi el mismo día de su aniversario, decide darse un tiempo para ella misma, necesitando buscar cómo quiere enfocar su vida en un futuro y si merece la pena luchar por su marido. Así que decide buscar respuestas en Londres y allí encontrará todas las que necesita y más. Un frasco unirá los mundos de Nella y Caroline de forma irremediable. En las dos historias hay algo de romance pero no es el tema principal, están en un plano muy secundario, apenas tiene relevancia en la historia, sí que son importantes sus relaciones amorosas para entenderlas, pero no es una novela romántica. Es narrativa histórica con toques de suspense. En definitiva, se ha convertido en una de mis mejores lecturas de este año. Engancha desde el principio, se nota el trabajo de documentación y el estilo no resulta tedioso, la trama de suspense está muy bien llevada y los personajes me han convencido cómo los ha perfilado. Aparte de la investigación por parte de Coraline y su trabajo para volver a conocerse y reencontrarse con ella misma; también tenemos, la moralidad de Nella y cómo se alza como guardiana y protectora de las mujeres en un mundo de hombres, usando para ello un arma mortífera: el conocimiento en el arte de los venenos, ahora si es guardiana o verdugo... cada cual que lo reflexione. Solo os puedo decir que merece mucho la pena conocer la conexión entre Nella, Eliza y Caroline y cómo labran su propio futuro. + Leer más |