Desde bien joven empecé a leer libros de Isabel Allende, pero después de devorar sus obras, decidí aparcarla durante unos años...posiblemente una década...Así que cuando decidí retomarla de nuevo, rescaté La isla bajo el mar que aguardaba impaciente a ser leída en la librería de casa. Este libro me sorprendió gratamente después de tantos años sin leer a esta autora. Trata el tema de la esclavitud en el Caribe, concretamente en Saint Domingue, desde la perspectiva de su protagonista, una esclava de nombre Zarité, quien a su vez es la narradora. El libro está ambientado en el periodo de los últimos años de la colonización francesa de Saint Domingue, tras ser vendido a Estados Unidos, después de más de un siglo de control francés. Este dato histórico es importante, porque todos los cambios ocurridos en aquel periodo los narra la escritora de una manera magistral, a través de Zarité junto con otros muchos personajes de su entorno. Cambios que lógicamente afectan la protagonista y que hace que su vida de giros muy variados. Con “tacto” se relata la venta de esclavos, los abusos y violencia contra ellos, su día a día, la rebelión de los esclavos y su venganza contra los que fueron sus amos, la lucha de poderes entre los propios rebeldes… Su relato muestra la sociedad de la época en las diferentes clases sociales, las tradiciones y creencias de los esclavos en su magia, todo ello a través de los personajes que van apareciendo. Aunque el libro narra la crudeza de la esclavitud, para nada es duro de leer. Relata una realidad, algo que existió, pero sin “cebarse” en la descripción de estas situaciones tan duras, con pocas palabras ya te puedes imaginar el resto de lo que ocurre. Pese a todo, la protagonista demuestra una adaptación a cada situación, a veces con resignación pero con un trasfondo de esperanza, lo que le hace sobrevivir y dentro de todas sus penurias, también queda espacio para momentos felices. Este libro me ha devuelto las ganas de volver a leer a esta autora. + Leer más |
“Jorge Ramos […] es una persona íntegra y de esas hay muy pocas en este mundo. A leer estas páginas de su memoria me entero de algunos secretos, me entretengo, me conmuevo y me reencuentro con el amigo de siempre, con el periodista que me pone al día sobre el acontecer y me recuerda los valores morales que suelen perderse en el ruido de la existencia cotidiana.” Isabel Allende
¿Sabías que Jorge Ramos estuvo a punto de ser atleta olímpico, o concertista de guitarra clásica? ¿O que su primer trabajo en Estados Unidos fue de mesero, ganando 15 dólares al día?
Así veo las cosas reúne los textos más personales y literarios escritos por Jorge Ramos a lo largo de cuatro décadas: desde sus primeros artículos en México sobre desastres naturales o sobre la guerra en Centroamérica, hasta sus reflexiones semanales sobre cuestiones como la familia, la tecnología, el oficio de periodista, el lado humano de sus viajes como reportero, sus queridas mascotas, o incluso temas tan personales como su nariz…
Esta íntima selección de columnas está ligada en el tiempo por tres “puentes” inéditos, que ofrecen al lector una visión sin tapujos de la historia personal de Jorge Ramos, en donde se presenta como nunca antes lo hemos visto, mostrando su lado más vulnerable: como papá, hijo, migrante, y hasta como el guardián de su adorada gatita, Lola.
“A mis 66 años, este libro es una especie de legado. Cuenta mi historia a través de las columnas más simbólicas y representativas que he escrito. Aquí te cuento de mi familia: de mis hijos, de mis mejores amigos y de la Jechu (así le decimos a mi mamá); de lo que he aprendido como periodista: las coberturas noticiosas que me han dejado cicatrices, del resentimiento ante los que abusan de su poder; del trauma y las oportunidades de ser inmigrante; de mis guerras (internas y externas), del miedo a morir; de mis grandes pérdidas y hasta mis más mayores alegrías. Aquí hay muchas cosas que nunca te conté.”