A propósito de nada de Woody Allen
La gracia de hacer una película es hacerla, el acto creativo. Los aplausos no significan nada. Incluso aunque recibas los elogios más entusiastas, seguirás teniendo artritis y culebrilla. ¿Y es tan terrible que la gente no se extasíe con tu obra? ¿Que a alguien no le guste tu película?¿El universo se está deshaciendo ala velocidad de la luz y a ti te preocupa que un tipo de Sheoboygan ponga objecciones al ritmo de tu filme? O, si de pronto una mujer de Tuscaloosa escribe que eres un genio, ¿tú crees que su opinión te eleva a la categoría de Rembrandt o Chopin? Basta de perder el tiempo con trivialidades.
|